Armarios empotrados Lacados

Armarios empotrados a medida lacados
La laca es un tipo de barniz o esmalte, compuesto por un material basado en una resina con otros componentes plásticos que le confieren flexibilidad. Este tipo de acabado proporciona protección y decoración a la madera. Se considera una alternativa a tener en cuenta a la hora de restaurar y modernizar el mobiliario antiguo.

La laca tiene como principal virtud la capacidad de aportar cualquier color y tonalidad al frente de armario, ya sea este de puertas correderas o de puertas abatibles, y así poder combinar perfectamente con cualquier tipo de mobiliario, suelos o puertas de paso. La laca para combinar con cualquier tipo de mueble o ambiente toma como referencia diferentes cartas de colores y tonalidades como Ral, NCS o Pantone).

Además de las infinitas combinaciones de color o tonalidad se puede el acabado:

  • Lacado mate: acabado opaco sin brillo.
  • Lacado satinado: acabado con cierto brillo sin llegar al reflejo.
  • Lacado alto brillo: acabado que le aporta a la madera un brillo parecido al vidrio.

Armario empotrado lacado blanco
La idea que tenemos del lacado, como acabado de mobiliario o puertas de armario empotrado es de un tipo de acabado caro y delicado en su durabilidad, que puede saltar el esmalte con un golpe y que con el tiempo tiene tendencia a amarillear. Esto ha sido así con las lacas antiguas, con las lacas de última generación más resistentes en el tiempo y más flexibles por sus componentes, estos problemas han quedado solventados siempre que la laca sea de calidad y el proceso sea el correcto.
En kirchen Armarios utilizamos lacas sintéticas y ecológicas de calidad para evitar el efecto rugoso y prevenir que amarillee con el paso del tiempo.

A continuación explicamos el proceso de lacado de nuestras puertas de armario:

  1. Preparar la superficie a lacar: se debe lograr una superficie lisa y uniforme, sin poro y sin veta, para ello se comienza con el lijado de la misma. Los materiales utilizados para lacar son el D.M o D.M.F
  2. Imprimación: con la imprimación mejoramos aún más la superficie, en este caso de nuestras puertas de armario. Mejoramos el correcto agarre de la laca y evitamos la temida “piel de naranja” en la superficie.
  3. Lijado: un segundo lijado deja la superficie ya imprimada, lista para recibir el lacado o esmaltado.
  4. Lacado: por último se “tira” la capa de laca. En kirchen Armarios tiramos como mínimo 2 capas de lacado para darle a nuestras puertas de armario más resistencia y durabilidad.

Sabiendo pormenorizadamente cual es el proceso de lacado de un mueble en general podrán elegir de entre todos los fabricantes el que mejor calidad y garantía de lacado ofrezca en sus productos. Y se podrá asegurar de su durabilidad en el tiempo y podrá evitar que la laca amarillee o pierda su lustro.

Por último unos consejos para conservar nuestros o armarios lacados:

  1. Limpieza: para limpiar el lacado de nuestro armario basta con agua, un jabón neutro y bayeta y secar posteriormente con una gamuza o trapo de algodón.
  2. Arañazos: sin estos no son muy profundos con cera en spray o sino con cera transparente.
  3. Amarilleo: para quitar el incómodo tono amarillento de muebles lacados antiguos se puede limpiar con agua oxigenada y un trapo de algodón.